Este artículo realiza un balance de la integración colombo-Venezolana, resaltando la importancia de los acuerdos económicos en la solución de los diferentes desencuentros políticos que han tenido los dos países a lo largo del siglo XX y XXI, por la delimitación de las aguas marinas el caso de los Monjes, la seguridad de la frontera y las posiciones divergentes en la lucha contra el narcotráfico, entre otras cosas. Se arguye que son los tratados en materia económica relanzamiento de la zona de libre comercio de 1991, el mercado común 1995 y los de complementación económica en los esquemas regionales como la ALADI o lo CAN, los que ayudarán a relanzar la integración comercial de bienes, servicios, capitales y por esta vía la integración bilateral en los campos políticos y sociales.